ESCRIBIR TE HACE MÁS INTELIGENTE | Y ES MUY FÁCIL CONVERTIRLO EN UNO DE TUS HÁBITOS DIARIOS.

Escribir es pensar con los dedos /Isaac Asimov Vaya día que ha salido Hoy no me quedo en casa, voy a dar una vuelta. Vamos. Espera, no te olvides de coger un cuaderno y un bolígrafo, que te van a hacer falta. Si leer incrementa tus conocimientos, escribir te hace más inteligente. Y no me refiero solo a la escritura creativa o al ensayo, sino al hecho de tomar notas regularmente o llevar un diario tanto para uso personal como profesional. Da igual a qué te dediques. Las buenas ideas pueden asaltarte en cualquier momento, y casi nunca mientras estás esforzándote en que lleguen, por eso el aire libre y la actividad física resultan tan útiles para los procesos creativos. A todos nos pasa: Se te ocurre algo que podría ser útil, o recuerdas el nombre o el detalle que te hacían falta para lo que fuese y un minuto después paf! se va de tu mente. Se esfuma. Y nunca vuelve. Por eso es importante poder tomar notas sobre la marcha. Cuando escribes algo lo sacas de tu mente, lo bajas al papel o al documento y eso te permite poder seguir con lo que estabas haciendo sin distraerte demasiado. A no ser que hayas salido con la intención de escribir y tomar el sol, como yo hoy, las notas no tienen por qué tomarse de forma estructurada todo el tiempo. Son un medio para evitar divagar: Escribes lo que tengas que escribir y lo guardas. Se trata de un simple volcado de información, y poco importa qué medio utilices. Muchos artistas tienen un documento que puede ser analógico o digital en el que vuelcan no solo todo lo que se les va ocurriendo cuando están fuera de su proceso creativo, sino también citas de otros autores fechas, imágenes... todo tipo de documentos. En este caso, las herramientas digitales resultan muy útiles pero parece ser que el papel y el lápiz son incluso mejores El lápiz es más poderoso que el teclado Varios experimentos han demostrado que los estudiantes universitarios que toman notas a mano obtienen mejores resultados que aquellos que lo hacen en su ordenador. Esto parece deberse a que quienes teclean tienden a copiar literalmente la información que reciben, mientras que quienes escriben a mano redimensionan la misma información al pasarla en sus propias palabras. Y esto se traduce en un aprendizaje más eficaz. Ver, escuchar, repetir en voz alta, escribir y leer lo que acabas de escribir. Con este proceso estás poniendo en marcha las redes neuronales que controlan la vista, el oído, el habla y el tacto, puesto que estás utilizando dos elementos físicos -el bolígrafo y el papel- para fijar esa información en la memoria. Cuantos más sentidos utilices en el proceso mayor pregnancia tendrá la información en tu memoria. Es decir, que cuanto mayor es el esfuerzo que ponemos en aprender algo mejor aprendido queda Además, el manejo del bolígrafo está ligado a cuando aprendiste a leer y a escribir Y aprender a escribir te costó mucho más que aprender a teclear. ¡Suscríbete y comparte!